Seguro que has visto esa letra “A” en una pegatina verde brillante en tu nueva lavadora o en el frigorífico de una tienda. Sabes que es bueno, que es lo mejor, pero ¿qué significa realmente la eficiencia energética de tipo A? No es solo una etiqueta, es la matrícula de honor de los electrodomésticos y las viviendas. En este post te voy a desvelar qué hay detrás de esa letra y por qué apostar por ella es una de las decisiones más inteligentes para tu bolsillo.
Descodificando la etiqueta: ¿qué significa realmente la clase A?
Imagina que la eficiencia energética es una carrera. La clase A es el corredor que llega a la meta usando la menor cantidad de energía posible. Es la categoría más alta en la etiqueta de eficiencia energética, un sistema que va de la A (más eficiente) a la G (menos eficiente).
Un producto o una vivienda de clase A está diseñado y construido con los mejores materiales y la tecnología más avanzada para cumplir su función con un consumo de energía mínimo. Esto se traduce en:
- Menor consumo de electricidad (kWh): necesita menos energía para funcionar a pleno rendimiento.
- Menor impacto ambiental: al consumir menos, se reducen las emisiones de CO₂ asociadas a la generación de esa energía.
- Mayor ahorro en tus facturas: este es el beneficio que notas directamente en tu bolsillo cada mes.
Si quieres entender el concepto global, puedes empezar por nuestra guía sobre qué es la eficiencia energética.
Dónde encontrarás la clase A
La etiqueta de eficiencia tipo A no es solo para un tipo de producto. La encontrarás en muchos elementos de tu hogar, y en todos ellos significa lo mismo: máximo ahorro y rendimiento.
En tus electrodomésticos
Es donde más acostumbrados estamos a verla. Un electrodoméstico de clase A puede consumir hasta un 50% menos que uno de clase media. Los más importantes son:
- Frigoríficos: al estar encendidos 24/7, que sea de clase A es crucial. Consulta nuestra guía de frigoríficos eficientes.
- Lavadoras y lavavajillas: sus programas ECO y su bajo consumo de agua y luz marcan una gran diferencia.
- Hornos y televisiones: aunque su uso es más puntual, la diferencia de consumo a lo largo de su vida útil es enorme.
En tu vivienda (Certificado Energético)
Una casa con eficiencia energética de tipo A es el sueño de cualquiera. Significa que está tan bien aislada y sus sistemas de climatización son tan eficientes (como la aerotermia) que apenas necesita energía para mantener una temperatura confortable. Esto se acredita con el certificado de eficiencia energética.
La pregunta del millón: ¿merece la pena pagar más por la clase A?
Seamos sinceros, un producto de clase A suele tener un precio de compra más alto que uno de clase C o D. Y aquí es donde mucha gente duda. ¿Compensa esa inversión inicial? La respuesta es sí, y con creces.
Debes pensar en el coste total del producto, que es la suma de su precio de compra más lo que te va a costar en electricidad durante toda su vida útil. Un electrodoméstico más barato puede ser un espejismo que acabas pagando mes a mes en tus facturas de la luz.
Mi consejo de experto: no mires solo el precio de la etiqueta en la tienda. Calcula el ahorro a largo plazo. Un frigorífico de clase A puede ahorrarte cientos de euros en sus 15 años de vida útil en comparación con uno de clase F. La inversión inicial no solo se amortiza, sino que acabas ganando dinero.
La nueva etiqueta energética: ¿qué ha pasado con A+, A++ y A+++?
¡Ojo con esto porque es muy importante! En 2021, la Unión Europea cambió la escala de la etiqueta energética para que fuera más clara. Las antiguas clases A+, A++ y A+++ han desaparecido.
La nueva escala va simplemente de la A a la G. ¿Qué significa esto?
- Lo que antes era un A+++, ahora puede ser una clase C o incluso D.
- La nueva clase A se ha dejado casi “vacía” para incentivar a los fabricantes a crear productos todavía más eficientes en el futuro.
Por lo tanto, encontrar un producto con la nueva etiqueta A es muy difícil y es sinónimo de la máxima excelencia tecnológica posible a día de hoy.
Cuándo apostar por la clase A sí o sí
Aunque siempre es recomendable, hay situaciones donde elegir la máxima eficiencia no es una opción, sino una obligación si quieres ser inteligente con tu dinero.
- En electrodomésticos de uso continuo: frigoríficos, congeladores… Cualquier aparato que esté enchufado 24 horas al día, 365 días al año.
- Al construir o reformar tu casa: invertir en un buen aislamiento, ventanas eficientes o un sistema de climatización de clase A es la mejor decisión que puedes tomar. El ahorro será para toda la vida.
- Si quieres acceder a ayudas y subvenciones: muchas subvenciones para la rehabilitación de viviendas exigen alcanzar una alta calificación energética.
¿Quieres hacer tu casa más eficiente?
Sabemos que dar el paso hacia la máxima eficiencia puede generar dudas. Si estás pensando en una reforma o en instalar un nuevo sistema de climatización y quieres asegurarte de que tu inversión merece la pena, llámanos y te asesoramos para que consigas la máxima eficiencia y el máximo ahorro.
Preguntas frecuentes sobre la eficiencia energética tipo A
¿Cuántos años tarda en amortizarse la diferencia de precio de un electrodoméstico de clase A?
▲Depende del electrodoméstico y de su uso, pero generalmente la inversión se amortiza mucho antes de que acabe su vida útil. En un frigorífico, por ejemplo, que tiene un consumo constante, la diferencia de precio se puede amortizar en tan solo 3 o 4 años gracias al ahorro mensual en la factura de la luz.
¿Es muy difícil conseguir un certificado energético de tipo A para una vivienda?
▼Para una vivienda ya construida, es muy difícil y requiere una reforma integral (cambio de ventanas, aislamiento de fachadas, un sistema de climatización de alta eficiencia como la aerotermia, etc.). Para una vivienda de nueva construcción, es más factible si se diseña desde el principio con criterios de casa pasiva o de consumo casi nulo.