Radiadores para aerotermia: guía completa para elegir bien

En pocas palabras

¿Quieres aprovechar al máximo tu sistema de aerotermia y no sabes qué radiadores elegir? No te preocupes, aquí te explicamos de forma sencilla qué radiadores funcionan mejor con aerotermia, sus ventajas y qué debes tener en cuenta para no cometer errores. Así sacarás todo el partido a tu calefacción eficiente y ahorrarás energía.

Qué son los radiadores para aerotermia y por qué son especiales

Los radiadores para aerotermia no son radiadores cualquiera. Funcionan con agua a temperaturas más bajas que los radiadores tradicionales, por lo que deben estar diseñados para calentar eficazmente a baja temperatura. Esto es clave para que el sistema aerotérmico rinda bien y ahorre energía.

Si usas radiadores convencionales pensados para calderas de gas o eléctricas, el sistema puede tener que trabajar más y perder eficiencia.

Por qué los radiadores deben ser de baja temperatura

Los sistemas de aerotermia trabajan con temperaturas entre 30 y 45 °C, mucho más bajas que las calderas tradicionales que suelen rondar los 70-80 °C. Por eso, los radiadores deben estar diseñados para ofrecer un buen rendimiento térmico en este rango reducido.

Si no, necesitarás radiadores más grandes o un mayor consumo energético para alcanzar el confort deseado.

Tipos de radiadores compatibles con aerotermia

Existen diferentes tipos de radiadores para aerotermia. Aquí te contamos los más comunes y sus características:

• Radiadores de aluminio: Son ligeros, con buena conductividad térmica y calientan rápido. Perfectos para aerotermia.
• Radiadores de acero panelados: Muy usados en aerotermia por su buena relación precio-rendimiento y su diseño compacto.
• Radiadores de hierro fundido: Aunque conservan el calor mucho tiempo, necesitan temperaturas más altas, no son ideales para aerotermia.
• Radiadores de baja temperatura específicos: Diseñados para trabajar a temperaturas entre 35 y 45 °C, ideales para sistemas aerotérmicos.

Consejos para elegir radiadores para aerotermia

Estas son algunas pautas que debes seguir para elegir bien los radiadores para aerotermia:

1. Prioriza radiadores de baja temperatura: Asegúrate de que soporten y funcionen bien entre 30 y 45 °C.
2. Valora el material: El aluminio y el acero son los mejores para la aerotermia.
3. Calcula la potencia necesaria: Cada estancia tiene sus necesidades térmicas, consulta con un profesional. Para una guía completa, revisa nuestro artículo sobre cómo elegir climatización y eficiencia.
4. Piensa en el diseño y tamaño: Radiadores más grandes pueden compensar temperaturas más bajas.
5. Comprueba compatibilidad con tu sistema: Si tienes suelo radiante, puede que necesites un sistema mixto o fancoils.

Errores comunes al usar radiadores con aerotermia y cómo evitarlos

• Usar radiadores antiguos o de alta temperatura: Pueden disparar el consumo y reducir la eficiencia.
• No dimensionar bien los radiadores: Radiadores pequeños no calentarán bien y aumentarán el gasto.
• Ignorar el aislamiento térmico: Radiadores adecuados no solucionan una mala envolvente. Para entender mejor cómo mejorar el aislamiento y ahorrar, puedes visitar ahorrar con climatización y eficiencia.
• No hacer mantenimiento adecuado: Radiadores sucios o con aire pierden eficiencia.

Mantenimiento y cuidado de los radiadores en aerotermia

Mantener los radiadores limpios y sin aire es clave para que funcionen eficientemente. Se recomienda purgar los radiadores al menos una vez al año y hacer limpiezas periódicas para evitar acumulación de polvo y mejorar la circulación del agua caliente.

Ventajas de usar radiadores compatibles con aerotermia

Cuando eliges bien, estos radiadores para aerotermia permiten:

• Calor homogéneo y confortable a baja temperatura.
• Mayor ahorro energético y menor factura eléctrica.
• Menor desgaste de la bomba de calor y sistema más duradero.
• Compatibilidad con sistemas de energía renovable.